¿Cuándo debemos parar? Parar de esperar, de buscar, de reír, llorar.. ¿Cómo saber dónde está el límite, el tuyo, el mío? Cómo decir no, cuando deseas con todas tus fuerzas un sí, cómo negarte, cómo ir en contra de lo que deseas, sientes.. ¿Racional o Pasional? ¿Cómo eres? ¿Quién eres? ¿Qué esperas que sea? Te propongo un juego... Enséñame a que lo que debo hacer y lo que deseo, sean uno sólo.

¿Te dejas seducir o seduces? ¿Das el 1er paso o esperas que lo den por ti?

A veces la falta de iniciativa no es más que la excusa perfecta para dejar escapar el tren de tu vida. 1ª parada: la timidez. 2ª parada: el miedo (al fracaso, a viejos fantasmas..).

Otras veces el exceso de iniciativa u entusiasmo puede provocar el efecto contrario: una huída despavorida. Como siempre: en el equilibrio se encuentra la clave de todo. ¿Quieres seducirme? ¿Dejas que te seduzca?

¿Deseas?

Hay una gran diferencia entre querencia, ilusión, deseo, sueño.. Tal vez resida en su intensidad, en lo factible que sea conseguir lo que anhelas, deseas, quieres.. La cuestión es:¿Qué deseas?¿Deseas lo que no puedes tener? ¿Tienes lo que deseas? ¿Deseas lo que tienes? Es importante caminar con paso firme, fieles a lo que somos, sin perder de vista quiénes queremos ser. Deseo la sencillez de las pesonas, lo complicado de las sensaciones, deseo..que nunca me falten sueños alcanzables y metas por las que seguir luchando